Es una obviedad que la actualidad manda y que temas sobre los que tienes pensado reflexionar quedan guardados en el cajón de lo que pudo ser, pero nunca fue. Eso sí, hay cuestiones que por obligación moral y ética me niego a olvidarme de ellas, aunque aparentemente hayan dejado de ser noticia. La de hoy es una de ellas.
La infantilización de la que es víctima nuestra sociedad nos lleva a situaciones tan preocupantes como el coitus interruptus vivido en torno a la petición del Ministerio de Igualdad de retirar la valla publicitaria de la bodega berciana Almázcara Majara. El argumento para solicitar dicha retirada era que su diseño cosificaba a la mujer. Como decía Antonio Resines en ‘Los Serrano’ a sus hijos cuando tenían algún pensamiento lascivo, me parece que hay mucha gente con la ‘mente sucia’.
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